Te miro y tiemblo.

Hacía tanto tiempo que no tenía este sentimiento, que hasta se me había olvidado. No es miedo, no es tristeza. Es algo diferente e innombrable que me aprieta el estomago. Y ha sucedido de forma completamente inesperada y de la manera mas sorpresiva.

Y regreso sin quererlo a otros tiempos en los que me sentía así. Y casi siempre todo acabó por salir bien, así que supongo que debo confiar en que esta vez, ojalá sea la última,y que tambien salga bien. Pero mientra tanto, me tiemblan las manos.

Y no se a donde me dirijo. Pero sigo caminando.

Comentarios

Entradas populares